EL DIOS RELOJERO

Los cristianos hemos dejad hace tiempo de creer en un Dios Creador,ya que consideramos que la ciencia nos puede explicar el orígen del Universo,de la Tierra y de la Vida sin la necesidad de un Sumo Hacedor. Pero dejar de creer que en un Dios que no sea la Fuente y el Orígen de cuanto existe es simplemente creer en un Ser desnaturalizado,inactivo,pasivo,que simplemente está ahí,y que no ha hecho nada. ¿Qué clase de Dios es ese?.

La razón es algo que nuestras mentes no deben perder jamás,y aquello que la ciencia nos ha explicado debemos aceptarlo,si no queremos ser unos fundamentalistas creacionistas. Pero la ciencia no lo dice todo,no lo explica todo,y en cualquier caso,los cristianos podemos y debemos,sonre unas bases que son la ciencia,explicar a Dios dentro de ella.

Han surgido teorías,como la del diseño inteligente,en mi opinión más acertadas que erróneas,y con un gran voluntad de reconciliar fe y razón. El único inconveniente que veo es que intenta exopicar,sin explicarlo,cómo fueron las cosas. Pienso que observando los eslabones perdidos y no hallados en la ciencia donde podemos,desde la fe,meter a Dios,pero sin decir lo que hizo,como lo hizo ni cuando lo hizo. Simplemente reconocer que no lo sabemos,salvo que Él estuvo ahí. Porque creemos en Él y porque solo Dios puede explicar ciertas cosas.

Supongamos que creamos que Dios es una especia de relojero,que fabricó el Reloj-Universo y el Reloj-Tierra. Y como no somos relojeros,no digamos cómo lo hizo. Pero si podemos creer que Dios fabricó unas máquinas perfectas con la capacidad de autorregularse por si mismas. Como un  reloj,que tiene un mecanismo para que cuente los segundos y los minutos y cambie las horas. Solo que un reloj no dura siempre y se estropea,y la Tierra tiene 4.600 millones de años,y jamás se ha estropeado.

En esta teoría,la de un Dios que fabrica,o interviene en el modelaje de la Tierra y convierte en una máquina que funciona por si misma,encontrariamos un mecanismo, la biosfera,que autorregularía  las condiciones del planeta para hacer su entorno físico (especialmente temperatura y química atmosférica) proclives a albergar las especies animales y vegetales que conforman la «vida». 

Según la segunda ley de la termodinámica, un sistema cerrado tiende a la máxima entropía. En el caso del planeta Tierra su atmósfera debería hallarse en equilibrio químico, todas las posibles reacciones químicas ya se habrían producido y su atmósfera se compondría mayoritariamente de CO₂ (Se estimó que la atmósfera debería componerse de, aproximadamente, un 99 % de CO₂) sin apenas vestigios de oxígeno y nitrógeno. Con el funcionamiento la Máquina-Tierra, el que al día de hoy la atmósfera la compongan un 78 % de nitrógeno, 21 % de oxígeno y apenas un 0,03 % de dióxido de carbono se debe a que la máquina ha hecho,a través de su funcionamiento programado,que la vida, con su actividad y su reproducción matemáticamente perfectas e inalterables, mantiene estas condiciones que la hacen habitable para muchas clases de vida.

Lo que el evolucionismo darwinista suponía era que la Tierra poseía las condiciones apropiadas para que la vida se diese en ella, y que esta vida se había limitado a adaptarse a las condiciones existentes, así como a los cambios que se producían en esas condiciones. Sin embargo,el evolucionismo no explica es cómo la Tierra se convirtio en el hogar perfecto para la Vida,a pesar de tenerlo todo en contra. La teoría de la Máquina- Tierra propone que es la propia Tierra,programada para funcionar de esa manera,la que ha sido la que ha convertido un planeta que debería estar desierto y sin vida en un hogar para millones de especies.

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