¿CONOCER A DIOS?

¿COMO SE PUEDE CONOCER A DIOS? ¿DE QUÉ MANERAS?

¿QUÉ NOS PUEDEN DECIR LOS MÍSTICOS,QUE SON AQUELLOS QUE LO HAN EXPERIMENTADO?

¿QUÉ NOS PUEDE DECIR LA FÍSICA CUÁNTICA SOBRE FENÓMENOS COMO LA SINCRONICIDAD Y LA CAUSALIDAD,EN LA QUE PARECE EXISTIR UNA MANO INTELIGENTE?

¿QUÉ PODEMOS AVERIGUAR DE LA ASOMBROSA CAPACIDAD AUTORREGULATORIA DE LA TIERRA Y DE LA VIDA,COMO SI FUESE UN ROBOT CREADO POR UN SER INTELIGENTE?

¿QUÉ PODEMOS APRENDER SOBRE LAS PRUEBAS MÁS CONTUNDENTES SOBRE LA LLAMADA PROVIDENCIA DIVINA,EN QUE EN NUESTRAS VIDAS Y EN EL MUNDO ENTERO ALGO OCURRE QUE SENTIMOS UNA FUERZA PROTECTORA?

EL DIOS BUENO DE LOS AFRICANOS

África es el único continente del planeta donde el desarrollo sigue sin llegar. Parece un continente sin esperanza,lleno de pobreza,de epidemias,de guerras,de inestabilidad. Un continente muerto. Pero hay testimonios que son testigos directos de lo allí pasa y atestiguan lo contrario.Como Cristina Antolín,que dijo algo que merecería que todo cristiano lo supiese: Dios está con los africanos,en el programa "Pueblo de Dios" de La 2 de TVE.

Cristina Antolín es misionera y doctora.Perteneciente a la Congregación de Santo Domingo,lleva 28 de sus 54 años de vida de entrega y bondad en Africa. Ahora está en el hospital San Martín de Porres de Yaoundé,la capital de Camerún.

Cristina es una mujer,como todos los hombres y mujeres misioneros, que no hace más que trabajar para salvar vidas,y aquellas que no puede salvar,al menos eliminar el dolor y hacerles compañía. Cristina es también una mujer muy observadora y ve la mano de Dios en los que sucede a su alrededor.Es cierto que ve morir gente,gente que no debería morir: niños pequeños porque sus padres no tenían dinero para ir hasta el hospital y cuando el niño llega ya no puede hacerse nada,enfermos de cáncer que ante la falta de medios diagnósticos y tratamientos cuando llegan al hospital llegan en un estado muy avanzado de la enfermedad...

Pero Cristina también,hace un testimonio sorprendente. Gente que llega al hospital muy enferma y qeu como médico considera que no tienen solución,se curan. Diagnostica una enfermedad,le da un tratamiento pensando a ver como funciona pensando que la curación no puede producirse...pero el enfermo se cura. La propia Cristina dice que cualquier de esos casos que llegasen a cualquier hospital en Europa,la gente se hubiese muerto. Pero en San Martín de Porres  y en África,no. Sobreviven. Cristina,por eso piensa,que hay un Dios especial para los africanos. Que Él está detrás de ellos,que les protege...Y no le falta razón. Cualquier misionero puede atestiguar lo mismo que Cristina.

Por eso África no es continente ni muerto ni sin esperanza. Es un continente de vida,de cada vez más vida en el. Porque hay un Dios que vela por ellos. Pondré muchos más casos de que hay un Dios que para los africanos es un infinito ángel de la guarda. Pero no solo con los habitantes de ese continente lleno de hermosura y vida,sino con los propios misioneros.

LA TEOLOGÍA DE LA FALSEDAD



Cuando uno se pone a pensar en los diferentes dogmas que han nutrido el cristianismo,se lleva las manos a la cabeza de como la ignorancia en el pasado haya podido llevar a cabo tantos despropósitos.La ignorancia de las gentes del pasado debe ser perdonada.Tenían que basarse en la Biblia,más concretamente en ese horror llamado Antiguo Testameneto para "conocer" los orígenes del universo,del mundo,de la vida y del ser humano.

Los antiguos hebreos crearon la historia de un Dios antropomorfo que crea todo en siete días,es decir,siete plazos de 24 horas.Primero crea las estrellas,después la Tierra,el Sol y la Luna,después los diferentes anímales que pueblan la Tierra y después,al hombre,del barro.Después saca una costilla de ese hombre y crea a la mujer.Vivían en un paraíso,pero había un árbol de cuyo fruto no podían comer.Una serpiente intrigante y parlanchina embauca a la mujer para que coma de ese fruto y después lo prueba el hombre.Dios,paseándose en medio de la brisa,sospechando que habían comido del fruto,tiene que enterarse por la confesión de ambos.Y lanza una maldición a la serpiente,al hombre y a la mujer.

De ahí nace un dogma que concierte al ser humano desde su concepción en un ser pecador,debe alcanzar la misericordia de Dios.Es el dogma del "pecado original".Que en el siglo XXI,no haya iglesia cristiana que lo haya declarado claramente falso,y que,aunque la leyenda infantil de Adán y Eva solo la crean los fundamentalistas instalados en su analfabetismo cultural,que se siga diciendo que un dogma e tal por un suceso inexistente demuestra hasta que punto la Cristiandad entera siguen sin utilizar la capacidad de raciocinio que Dios nos ha dado.

¿Qué hay detrás del mantemiento de que "nacemos con la mancha del pecado original"? Es muy sencillo,tener que realizar ritos,actos de fe,adhesiones inquebrantables,etc...que toda Iglesia hace.Todas necesitan fieles,y esos fieles,que quieren,logicamente "ir al Cielo y salvarse",dentro de esas comunidades se sienten "salvados".Unos por el simple hecho de la fe que los santifica,otros santificándose con los sacramentos.

Decir que el "pecado original" no existió,y que por tanto,no es transmitido en los genes generación tras generación,hace innecesaria ritos y actos de fe.El ser humano puede ser un cristiano libre,un cristiano evangélico,un cristiano cristocéntrico y que deja atrás el esquizofrénico Antiguo Testamento y deja de ser esclavo de esa falsa e injuriosa visión que da de Dios,sino también que dogmas como el "pecado original",que nos convierte ya a todos en pecadores,necesitados de salvación,que cada iglesia considera que solo ella puede dar.


EL NITRÓGENO: EL FUNCIONAMIENTO DE UNA MÁQUINA

El constituyente más abundante de la atmósfera es, con gran diferencia, el nitrógeno gaseoso; supone el 79 por ciento del aire respirable. Los dos átomos de su molécula están unidos por un enlace químico de los más potentes, lo que le confiere una notable falta de reactividad. Se ha acumulado en la atmósfera a causa de la acción de las bacterias desnitrificantes y de otros procesos biológicos. Ciertos procesos inorgánicos, como las tormentas, lo devuelven lentamente al mar, su habitat natural.

Pocos se percatan de que no es el gas la forma estable del nitrógeno, sino el ion nitrato disuelto en el mar. Como vimos en el capítulo 3, si la vida desapareciera, la mayor parte del nitrógeno atmosférico terminaría por combinarse con el oxígeno volviendo al mar en forma de nitrato. ¿Qué ventajas obtiene la biosfera de bombear nitrógeno a la atmósfera además del mantenimiento del equilibrio químico?

En primer lugar, la estabilidad del clima quizá requiera la actual densidad atmosférica y el nitrógeno resulta conveniente para incrementar la presión.

En segundo, un gas de reactividad escasa como el nitrógeno es lo más adecuado para diluir el oxígeno del aire; como hemos visto en páginas anteriores, una atmósfera de oxígeno puro tendría consecuencias desastrosas.

En tercer lugar, si la totalidad del nitrógeno estuviera en los mares como ion nitrato, el siempre delicado problema de mantener la salinidad lo bastante baja para permitir la vida, empeoraría. Como veremos en el capítulo siguiente, la membrana celular es extremadamente vulnerable a la salinidad de su entorno; una salinidad total por encima de 0,8 molar la destruye, con independencia de que se trate de cloruro, de nitrato o de una mezcla de ambos.

Si todo el nitrato estuviera en los mares como ion nitrato, la molaridad pasaría de 0,6 a 0,8: ello significaría la incompatibilidad del agua marina con casi todas las formas conocidas de vida. Señalemos finalmente que además de su efecto sobre la salinidad marina, las concentraciones altas de nitrato son venenosas. La adaptación a un entorno con fuerte contenido de nitratos habría sido más difícil y más onerosa energéticamente para la biosfera que el simple almacenamiento del nitrógeno en la atmósfera, donde además resulta de cierta utilidad. Cualquiera de las posibilidades expuestas podría, pues, constituir un motivo válido para justificar la existencia de los procesos biológicos que transportan nitrógeno desde la superficie a la atmósfera.

La cuantía de un gas atmosférico no es, evidentemente, medida de importancia. El amoníaco, por ejemplo, cien millones de veces menos abundante que el nitrógeno, tiene una función reguladora tan importante como la de éste. En realidad, la producción anual de amoníaco es tan cuantiosa como la de nitrógeno, pero su remoción es mucho más rápida. La abundancia de los gases de la atmósfera depende mucho más de su tasa de reactividad que de su tasa de producción, como demuestra el hecho de que los gases menos abundantes suelan ser actores principales en los procesos de la vida